Sobrevolando Craiova!

El miércoles nos levantamos a las 6 de la mañana para ir al aeródromo que se encuentra a las afueras de Craiova. Nada tiene que ver con lo que nosotros nos imaginámos, una pista de despegue y aterrizaje, una pequeña terminal y un hangar, pues bien, este aeródromo sólo contaba con el hangar en condiciones, dado que la terminal estaba bastante deteriorada y la pista era como antiguamente se utilizaba, de tierra.

Imagen. Pista de despegue y aterrizaje.

Imagen. Hangar, donde los paracaidistas ensayan los pasos a seguir una vez hayan abandonado el avión.

Una vez presentada la pista y el hangar, le llegó el turno al avión que nos iba a mostrar de una perspectiva diferente la ciudad donde resido, Craiova.  La puesta en macha del mismo fue como en las películas, nunca pensé que volaría en un avión de estas características, después de esto los Binter son unos Boing 747. 

Imagen. El avión.

Imagen. Cabina de mandos! 

Tras la preparación de los paracaidistas en tierra nos subimos todos en el pequeño avión, mi cara al subir al mismo fue un poema, dado que los asientos eran unas simples butacas de plástico y carecían de cinturones de seguridad.  Uno de los paracaidistas que por su apariencia transmitía profesionalidad nos indicó que nos agarráramos al canto de las ventanillas para despegar, y así lo hicimos. El avión cogió velocidad y hacia el cielo nos dirigimos, solo dos minutos después del despegue el instructor abrió la puerta, y seis minutos mas tarde los paracaidistas comenzaron a lanzarse del avión.

Vídeo. Paracaidistas saltando.

Imagen. Vista aérea de la ciudad y del río que pasa por la ciudad.

Para finalizar con esta entrada decir que la experiencia ha sido impresionante, que la sensación de felicidad que sentí en el interior de ese avión no la cambio por nada del mundo.

SEGUIMOS ACUMULANDO EXPERIENCIAS!!!